La ironía gallega no sirve para todo.

Juventudes Socialistas de Argamasilla de Calatrava

Así se titula la Editorial de el diario El Mundo de hoy en alusión directa a Mariano Rajoy y su postura ante las acusaciones de escuchas telefónicas y persecución política, de la que hizo alarde Mª Dolores de Cospedal y su ya celebres burras declaraciones. Entre otras muchas duras criticas (de las que tampoco se escapa el Gobierno,nobleza obliga), estractamos las siguientes:

"LEJOS DE INTENTAR BUSCAR una salida airosa a lo que a todas luces parece una metedura de pata de la secretaria general del PP, Rajoy y su equipo de dirección persisten en el error. Desde aquella comparecencia de María Dolores de Cospedal a pie de playa en la que dijo que dirigentes del PP tenían los teléfonos pinchados, prácticamente todos los días distintos miembros de la dirección han ensayado justificaciones, en algunos casos peregrinas, cuando se les ha solicitado que aporten los datos necesarios para sostener una de las denuncias más graves que se pueden hacer contra un Gobierno en democracia. La número dos del PP no ha podido concretar sus acusaciones [...]

Hace unos días el propio Mariano Rajoy aludía a las escuchas ilegales del antiguo Cesid -por las que dimitió Serra como vicepresidente- como precedente que hace creíble la acusación de espionaje, sin tener en cuenta que en esa ocasión sí había pruebas que se publicaron en EL MUNDO. El presidente del PP insiste en ello y presenta sus evidencias en este caso: «detenciones televisadas, filtraciones del sumario, publicaciones de actuaciones policiales que no están en el sumario». Esta ristra de actuaciones deplorables, sin embargo, no constituye prueba alguna de pinchazos telefónicos ilegales. Seguramente Mariano Rajoy ya lo sabe y por eso remata así su entrevista con un diario gallego: «Algunas las denunciamos ante los tribunales, y otras lo haremos o no» [...]

Cuando un partido denuncia estar sometido a espionaje telefónico o escuchas ilegales y culpa al Gobierno, no hay bromas que valgan. O se ofrecen los datos para sustanciar la acusación o se rectifica con el menor daño posible. No es de recibo decir, como hizo ayer la secretaria general del PP, que ella no tiene por qué dar los datos porque el PSOE sabe que es verdad. La responsabilidad de la actuación pública conlleva la obligación de poder sustentar las afirmaciones que se hacen. Lo contrario supone frivolizar el ejercicio de la política, y bastante mala imagen tiene ya esta profesión ante los ciudadanos.[...]"

Nunca pensamos que en los puntos esenciales coincidiríamos con una editorial de El Mundo y no por que critique al PP ( que también) sino por lo que dice en el último parrafo es el fondo del asunto y lo que nos preocupa a nosotros.

O la crisis salva al PP, o Rajoy y de Cospedal, se encargarán de hundirlo sin ayuda de nadie.

Lee la editorial entera:http://www.elmundo.es/elmundo/2009/08/24/opinion/18976067.html